"Permítaseme reconocer el problema para que pueda ser resuelto."No
podemos resolver (ni saber si está resuelto) un problema a menos que
sepamos de qué se trata. El problema de la separación, que en realidad
es el único que hay, ya se ha resuelto. Pero no lo hemos reconocido
porque no reconocimos el problema; esta es nuestra situación hoy.
Parecemos enfrentarnos a una larga lista de problemas, y apenas uno se
resuelve, otro lo reemplaza; parecen no tener fin. Nadie podría resolver
todos los problemas que el mundo parece tener, además. La tentación de
considerar que los problemas son múltiples es la tentación de dejar el
problema de la separación sin resolver; y tal como los percibimos, el
desaliento y la depresión son inevitables. Si pudiéramos reconocer que
nuestro único problema es la separación, en cualquier forma que se
manifieste; que existe un común denominador, comprenderíamos que
disponemos de los medios para resolverlos todos.
En las sesiones
largas de hoy (2 de 10,15 min), preguntaremos cuál es el problema y cuál
su solución. No asumiremos que ya lo sabemos, y trataremos de liberara
nuestras mentes de las innumerables clases de problemas que parecen
tener. Trataremos de reconocer que sólo tenemos un problema que no hemos
reconocido. La respuesta a nuestras preguntas nos será dada. Tratá de
no insistir en definir el problema; tratá de poner en duda tu definición
de tu versión de lo que son tus problemas. Tratá de darte cuenta que al
reconocer el problema real, también tenés la solución y podés quedar en
paz.
En las sesiones cortas, (hoy no están regidas por el reloj,
sino por la necesidad) ante cada problema que se te presente, recordate
que tenemos que reconocer que hay un solo problema y una sola la
solución. Con este reconocimiento, todos los problemas se resuelven y
llega la paz. Ante cada dificultad que parezca surgir, decite de
inmediato: "Permítaseme reconocer el problema para que pueda ser
resuelto." y tratá de suspender todo juicio respecto al problema. Si
podés, cerrá los ojos y preguntá cuál es el problema. Serás escuchado, y
se te responderá.