jueves, 3 de mayo de 2012

Lección 156

"Camino con Dios en perfecta santidad."
La idea de hoy expresa la simple verdad que hace que el pecado sea imposible. Asegura que la culpabilidad no tiene causa, y por lo tanto, no existe. Las ideas no abandonan su fuente, por ende, ¿cómo podrías estar solo y separado de Dios, que es tu Fuente?
La verdad, si es verdad, tiene que serlo de principio a fin. No podés estar separado de Dios, porque no podés existir sin Él, que es lo que es tu vida. Hay una sola vida: la que compartís con Él. Y allí donde Él está, tiene que haber santidad así como vida. Todo lo que vive es tan santo como Él; no puede elegir no serlo, como el sol no puede elegir no calentar. Hay una luz en vos que no puede extinguirse, y que el universo ansía contemplar, porque es la luz de la santidad de Dios. Así opera la salvación; cuando te hacés a un lado, la luz que vive en vos da un paso adelante y envuelve el mundo, y el pecado desaparece entre risas, reconociendo su absurdidad e inexistencia.
"¿Quién camina a mi lado?" Hacete esta pregunta mil veces al día, hasta sentir la certeza y la paz. Siguiendo el Esquema de trabajo que establecimos, decite a vos mismo: "Camino con Dios en perfecta santidad. Ilumino el mundo, ilumino mi mente, así como todas las mentes que Dios creó una conmigo"

Ángel YLAHIAH

jueves, 3 de mayo de 2012
Descripción 
La energía que debemos utilizar el 3 de mayo se llama Ylahiah y lleva el número 44 .
El ángel que permanecerá activo hoy lleva el nombre de Ylahiah y se dedica a distribuir talento militar, es decir, esa esencia que te permite ordenar tu vida y dirigirla de forma en que puedas ganar las batallas que se te presenten en la gran guerra de la vida. 
Es un buen momento para que trates de rectificar los errores que hayas cometido. 
Si no utilizas esta energía conscientemente, es fácil que, sin darte cuenta, el carácter se agrie y tu naturaleza se vuelva violenta y/o destructora. 
 
 Plegaria:
YLAHIAH : Dios Eterno.  
Acoge, ¡Oh Eterno!, los sentimientos que mi boca expresa, 
y enséñame tus leyes. YLAHIAH, 
si me has elegido a mí como instrumento de tu justicia,
mantenme dentro de tu luz, 
sin permitir que mis sentimientos se desborden impeliéndome a tomar la justicia por mi mano. 
Guíame, Señor, hacia las escuelas del saber, 
donde pueda instruirme sobre tus leyes y tomar conciencia de la organización del cosmos. 
Haz que las empresas en las que triunfe sean aquellas que inspira tu designio. 
Y estando tu voluntad en juego, haz que sea ese héroe mediante cuyo comportamiento todo el universo da un magistral paso adelante.