sábado, 21 de enero de 2012

Lección 60

"Dios es el Amor en el que perdono".
Dios no perdona, porque jamás ha condenado. Para mí, el perdón es el medio por el cual reconoceré mi inocencia, es el reflejo del Amor de Dios en la tierra; llevándome tan cerca del Cielo que el Amor de Dios podrá tenderme la mano y elevarme hasta Él.
"Dios es la fortaleza en la que confío." No es con mi fortaleza con la que perdono, sino con la de Dios en mí, la cual recuerdo al perdonar. Y empiezo a recordar al Amor que decidí olvidar, pero que nunca se olvidó de mí.
"No hay nada que temer." ¡qué seguro me parecerá el mundo cuando lo pueda ver! Todo en él me bendecirá; reconoceré en todo al Amigo más querido. ¿qué puedo temer en un mundo que he perdonado y que a su vez, me ha perdonado?
"La voz de Dios me habla durante todo el día. " No hay un momento en que Su voz deje de guiar mis actos y dirigir mis pensamientos. Me dirijo firmemente hacia la verdad; no hay otro lugar adonde ir porque la voz de Dios es la guía que se le dio a Su Hijo.
"El Amor de Dios es mi sustento." Cuando escucho la voz de Dios, su Amor me sustenta. Cuando abro los ojos, su Amor alumbra el mundo para que pueda verlo. Cuando perdono, su Amor me recuerda que Su Hijo es impecable. Y cuando contemplo al mundo con su visión, recuerdo que yo soy Su Hijo.

Lección 59

"Dios va conmigo dondequiera que yo voy".
¿Cómo puedo estar solo, dudar, sentirme inseguro, sufrir, cuando en Él mora la perfecta certeza, la paz absoluta, el amor? Soy perfecto porque Dios va conmigo dondequiera que yo voy.
"Dios es mi fortaleza. La visión es Su regalo". Hoy no recurriré a mis ojos para ver. Hoy me valdré del regalo de la visión de Cristo para que este día me ayude a comprender la eternidad. "Dios es mi fuente. No puedo ver separada de Él." Puedo ver lo que Dios quiere que vea; más allá sólo hay ilusiones. Es a través de la visión de Cristo como elijo ver.
"Dios el la luz en la que veo".No puedo ver en la oscuridad, y Dios es la única luz. Por lo tanto, si voy a ver, tiene que ser por medio de Él. Le doy la bienvenida a la visión y al mundo feliz que me mostrará.
"Dios es la Mente con la que pienso".No tengo pensamientos que no comparta con Dios, porque no tengo otra mente que la Suya. Mis pensamiento son Suyos, y los Suyos, míos.